Ir al mercado central siempre es un placer. Sobre todo en esta época del año, en el mes de marzo, cuando faltan unos días para la primavera y a pocos días de las fallas, hacen que Valencia sea una ciudad llena de vida.
La ubicación del meracdo central, entre el edificio de La lonja de la seda y la Iglesia de los Santos Juanes es una maravilla.
Entramos en el mercado, una construcción modernista sin estilo definido, pero bonito, su cúpula central y todas sus vidrieras hace que esté iluminado todo el interior con luz natural.
Casi doscientos puestos de frutas, verduras, pescado, carne, panaderias, etc. hace que el mercado central sea uno de los mayores centros europeos de comercio de productos frescos.
.....y hace que te den ganas de comprarlo todo...esas fresas brillantes, esos tomates tan rojos y toda la variedad de productos que no los puedes encontrar en un supermercado.
Quedamos para ir sin ningún objetivo concreto de compra, pero una vez allí y después de un suculento almuerzo en uno de los bares del interior, nos ponemos a comprar...
El encanto del mercado central es el contacto directo con el vendedor, casi siempre dispuesto a asesorarte y a ofrecerte sus mejores productos, y si algún comerciante nos engaña....como dice Sonia, ya no volveremos a comprarle y listo.
Nuestro objetivo es el regateo y conseguir calidad al mejor precio posible.
Conseguimos sardinas a buen precio, calçots de temporada y pulpitos, ya está decidida la cena!!
Conseguimos sardinas a buen precio, calçots de temporada y pulpitos, ya está decidida la cena!!
He de aclarar que yo le dije eso al pescatero porque empezó a poner sardinas de un lado y de otro, entonces yo le comenté: "Si m'enganyes en no tornar a comprar-te prou"
ResponderEliminarNo es que piense que me van a tomar el pelo, jijijiji.
Todas las semanas que trabajo voy a comprar al mercado central. Me gusta pasearme por sus puestos y creerme que hago una buena compra. Para eso suelo repetir los puestos que me dejaron buena impresión la última vez. Por ejemplo: voy a un puesto en el que compro todas las semanas una lechuga, una hoja de roble, un kg de cebolla tierna y tres manojos de rábanos por 3€. Ve tú a comprar esto al Mercadona, a ver a qué te sale. Pero no te creas que yo voy sólo por el precio, voy porque admiro a la mujer que los vende. Es de una lentitud extrema, yo a veces he llegado a pensar que en lugar de ponerme una lechuga en la bolsa lo que está haciendo es tai-chi. Y me divierte este acercarme “a lo oriental” mucho más que la idea del Roig de que trabajemos como chinos.
ResponderEliminarTendras que decirnos cual es ese puesto de tai-verduras... solo de leerte ya me transmite tranquilidad....que es lo que ultimamente nos falta!!! gracias!
EliminarEl Mercado Central es un espectáculo único. La colisión de olores, colores y formas, los dibujos abstractos que forman los productos en los puestos. El bullicio de la compra venta que dignifica la transacción. Si tuviéramos que recorrer cientos de kilómetros para visitarlo no faltaríamos a la cita, como " es al costat" a penas vamos
ResponderEliminarAsí es...las cosas que tenemos tan cerca no las valoramos...bonitas palabras, mono3
EliminarEmperadora, me deslumbras con tú sabiduría, me gustaría conocer a la señora verdulera taichi, ya quedamos.
ResponderEliminarBesets.
mono3, es cierto, pero cuando por fin llegas no te irías nunca. Qué lugar más atrapador! ;-)
Uno de los grandes lugares de nuestra Valencia, visitado por los miles de turistas y como dice nuestro amigo un gran desconocido para muchos de nosotros.
ResponderEliminarInvito a visitarlo a cualquiera y a descubrir todo lo tradicional que lo envuelve, tanto en su edificación como en su forma de vender y de llamar la atención al posible comprador.
Si esto estuviera en otro país hubiera salido en todos los reportajes que nos emitieran de el y por supuesto resaltando la excelente calidad de sus productos y su gran variedad para todos los gustos.
Defendamos lo nuestro y menos recortes y mas cultura.
Y por supuesto pasamos un día genial y aprendimos que a nuestro amigo Marcel le encanta escuchar la gran frase china TU QUIELE PELICULA, seguro que aun se esta riendo.
Un abrazo para todos.
El peque.